que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!
pues ya no eres esquiva,
acaba ya si quieres;
rompe la tela de este dulce encuentro.
¡Oh cauterio suave!
¡Oh regalada llaga!
¡Oh mano blanda! ¡Oh toque delicado,
que a vida eterna sabe
y toda deuda paga!,
matando muerte en vida la has trocado.
¡Oh lámparas de fuego
en cuyos resplandores
las profundas cavernas del sentido
que estaba oscuro y ciego
con extraños primores
calor y luz dan junto a su querido!
¡Cuán manso y amoroso
recuerdas en mi seno
donde secretamente solo moras
y en tu aspirar sabroso
de bien y gloria lleno
cuán delicadamente me enamoras!
6 comentarios:
Me encanta San Juan de la Cruz, se lo pongo a los alumnos mucho para que me digan si es una poesía amorosa o religiosa. Nadie lo asocia con el misticismo del encuentro con dios.
Es que tal vez fue al encuentro con dios, de la mano de alguna musa inspiradora ;)
Besos.
Ohh! Luis!
Gracias por tu visita a mi blog...
Gracias por el comentario.
Bellos tus escritos!
Saludos Sinceros desde el Norte de Mexico!
Gracias a ti Alma, me gusta lo que escribes en tu blog, lo puse en la lista porque vale mucho y para los nombres en inglés tengo mala memoria :P
Besos..
El que de amor adolesce,
de el divino ser tocado,
tiene el gusto tan trocado
que a los gustos desfallesce ;
como el que con calentura
fastidia el manjar que ve,
y apetece un no sé qué
que se halla por ventura.
Besitos
La verdad es que si hay que andar adoleciendo mejor que sea algo tangible, osea tocable :P
Besos..
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